En el año ochenta en Bogajo

hubo un caso que contar,

que las viejas de este pueblo,

ya no se podían lavar.

Se acabó el agua del caño,

Donde iban a buscar

Y la Fuente La Ribera

¡Ay... qué largísimo está!

Se acabó el agua del caño,

No tenemos para beber

Hay que darle a la cerveza

para poder matar la sed;

Y se le acaban a Venancio

Y como no venga el camión,

hay que tratar de hablar

Al señor gobernador,

Que nos dé una solución

Muy pronto si puede ser,

porque las viejas ¡señor!

se nos mueren ya de sed.

En el año ochenta y uno

¡por fin! viene un camión,

del ejército con agua

pero las personas,

no pueden beber.

Señores, hay que tratar

de hacer un sondeo

que dé mucho agua y

pueda todo el pueblo beber.

Hubo suerte, salió agua

en el Campo la Huerta,

al pie de la charca.

Pasó mucho tiempo,

tardó en funcionar

que si luz, que si permisos,

que si tal y que si cual

En el año 84 ya funciona.                    

La automática sabe

cuando ya no hay agua.

Ya tenemos agua

gracias al sondeo

y a ese señor cura

que indicó el "agujero",

a D. José Herrero.

Aunque haya quien diga

que yo no la quiero

porque para bombear

hay que pagar,

algo de dinero.

Que sea permanente

todos deseamos,

que haya agua abundante

para muchos años.

Nuestra mayor ilusión

es tenerla en las casas,

buena intención si tenemos

pero de pasta carecemos.

A ver si se compadecen

los señores del Gobierno

y nos dan unos millones

para cumplir este proyecto.

Hasta la Socorro Goma

le ha escrito al señor Felipe

para que tenga piedad

de estos pobres infelices.

Y Felipe le ha contestado:

Esté usted tranquila

que ya irá llegando.

Ya ha dicho el señor Vidal

que nos van a dar algo

para comenzar las obras

despacito y con cuidado.

El setenta por ciento

dice que nos dan

pero el otro treinta,

tenemos que aportar.

Ya dice que viene

que viene el agua

que están unos señores

haciendo las gavias.

La Maribel se cayó en la gavia.

pero no era una moza

que era una vaca.

Y llega el momento del pago

nadie se ha movido

y ahora protestamos;

porque la unión hace la fuerza

y como no haya unión

todos por puertas.

Ahora las acometidas

nos las han puesto muy caras,

porque no tenemos

los 30 papeles para pagarlas.

Es una vergüenza

llevar eso por el enganche

siendo la general nuestra.

¡Ay que fastidiarse!

Todos estamos contentos

con el agua ya en las casas

pero algunos sin probarla

dicen que sale salada.

Aguas pasadas

no muele el molino.

Esto ocurrió en Bogajo

partido de Vitigudino.

              Autor: J. "Cabrillas"